COMERCIANTES DE EL PALO PROTESTAN CONTRA LA COMPETENCIA DESLEAL DEL MERCADILLO 'PIJO'
Unos cien comerciantes de la zona de Echevarría de El Palo y Centro Histórico han estampado sus firmas para protestar ante la competencia desleal que les supone la existencia del mercadillo de principios de mes que se celebra en el Paseo Marítimo y que muchos denominan «el mercadillo de las pijas».
Según sus testimonios y los del representante legal que les asiste esto ha supuesto el cierre de algunos de ellos «y una notable pérdida de ventas». Estos puestos se han ubicado anteriormente en la explanada del CACMálaga y el Balneario de los Baños del Carmen, de donde partieron para quedarse próximos al arroyo Jaboneros el pasado mes de noviembre.
Según algunos de los comerciantes afectados, «al comienzo predominaban los artículos artesanales y era reducido, mientras que ahora hay muchos más tenderetes y venta extendida de prendas de marca», criticó María del Mar Galán, quien tuvo que echar el cierre a una tienda de ropa de niño.
La competencia desleal que sufren se sustenta, según ellos, en varias cuestiones: «No podemos competir en precios con gente que no paga su autónomo o están dados de alta en el IAE, o que en muchos casos también sabemos que no tiene el carné de manipulador de alimentos y venden comida. A mí Consumo me exige que no venda ropa de niño con lacitos cerca del cuello por el peligro que entraña y por allí nadie vigila estas cosas, ni tampoco se ve tanta Policía como en otros mercadillos», agregó.
«A muchas tiendas del centro le degradan sus marcas, ellos pagan 30 euros y a correr. No es justo», se quejó Sofía de la Herrán, quien regenta un establecimiento de artículos de cuero.
Por su parte, el abogado Manuel Huertas, que representa a estos comerciantes y además es presidente de los mercadillos ambulantes de Málaga, explicó que esperan respuesta a una pregunta que hicieron llegar a los responsables municipales mediante escrito en pleno, y por la que sabrán adónde van los entre 30 y 50 euros que paga cada vendedor con puesto y a qué se destinan.
Además quieren saber por qué no se publica la convocatoria de solicitudes de puestos, adónde se dirigen los habituales impuestos que se cobran por el uso de suelo público y otras cuestiones. «No sería justo que se lo pidieran a unos vendedores del mercadillo de Huelin, por ejemplo, a los que se mira con lupa todas estas cosas y que no venden productos que hagan competencia a tiendas convencionales», defendió Huertas.
«Recuerdo perfectamente que en la víspera de Reyes hubo mercadillo y me venían las clientas y me decían que ya habían encontrado lo que buscaban en este otro lugar. Lo noté mucho», apuntó De la Herrán.
Al hilo de esto Galán señaló otro fenómeno que cunde a raíz de este tipo de mercadillos:«Muchas tiendas y artesanas hacen show rooms en la casas y ahí tampoco son habituales las facturas o el IVA, además de que las propias creaciones se ofrecen a gusto del consumidor, con lo que también es difícil competir».
Por todo esto los comerciantes se atreven a señalar una posible «malversación de caudales públicos», según Huertas, y de momento las respuestas del Distrito Este no son satisfactorias, pues al parecer el único requisito indispensable para participar en el mercadillo es ingresar en una cuenta 50 euros.
Por su parte, Tina Suárez, una de las responsables del mercado artesano, aseguró a este periódico que éste «dinamiza la zona» y que se están «regularizando a las artesanas y artesanos» que en él venden, «donde tampoco hay ropa de marca», por lo que no hay competencia desleal alguna. Aseguró que pagan un seguro y los impuestos que les reclama el Ayuntamiento.